8. Tener una Web Pornográfica
Lo creas o no, pasó. En 2009, a una enfermera de Pennsylvania se le retiró su licencia por tener su propia web pornográfica. Esto podría estar perfectamente dentro de la categoría “conductas poco profesionales” y es fácil soltar una risita al leerlo. Pero con los avances tecnológicos que hay hoy día y el extenso alcance de internet, las enfermeras que utilizan sus webcams para sacarse un sobresueldo pueden acabar sin trabajo.
9. Maltrato a Pacientes y Negligencia
Es triste, pero sucede más a menudo de lo que nos gustaría admitir. La negligencia y el maltrato a pacientes pueden ocurrir porque una enfermera hace daño o causa sufrimiento a un paciente intencionadamente o por un error causado por una sobrecarga de trabajo y demasiados pacientes a los que atender. La negligencia y el maltrato a pacientes no hacen daño solo al paciente. Su familia y amigos también sufren, lo que hace que esta grave falta sea aún peor.
Lamentablemente, esto es algo que sucede demasiado a menudo. Muchas veces, una enfermera no descuida a un paciente intencionadamente, pero un despiste puede causar más daño del que nos imaginamos y tener como consecuencia la inhabilitación profesional.
10. Violar los Términos de tu Práctica Profesional
Si has comedido infracciones anteriormente, puede que te permitan seguir practicando la enfermería pero con ciertas restricciones —Pueden limitar tu práctica o tus hábitos personales (como beber alcohol o tomar drogas). Si violas los términos establecidos para tu práctica profesional, pueden inhabilitarte profesionalmente. Que te permitan la práctica con restricciones es una advertencia. Se espera que la enfermera cambie su comportamiento para que pueda seguir trabajando normalmente. Pero si ese comportamiento sigue o si la enfermera intencionadamente incumple las normas establecidas, su comportamiento puede acabar penándose con la pena máxima para ese caso.