Dicen que “se necesita un pueblo para criar a un niño”, pero ¿qué pasa cuando se habla de 36 niños?

Un grupo de 36 enfermeras de la UCIN ha creado su propia pequeña comunidad ahora que todas son madres con bebés en casa. Todas dieron a luz en 2019 y desde entonces han seguido criando a sus hijos juntas. Estas mujeres comparten esta experiencia mientras se mueven entre la maternidad y sus carreras.

Algunas dicen que la experiencia de dar a luz las ha convertido en mejores enfermeras neonatales porque ahora pueden relacionarse con lo que está pasando la madre.

Un verdadero “baby boom”

Si visitas el Children’s Mercy Hospital en Kansas City, seguramente verás algunos niños corriendo.

Sarah Carbaneau, enfermera de la UCIN, reflexionó recientemente sobre la experiencia de dar a luz casi al mismo tiempo que muchas de sus colegas.

“Creo que ser mamá me ha dado una perspectiva completamente nueva y ahora, cuando cuido a un bebé, realmente lo hago… Sé cómo se sienten esa mamá y ese papá, y la manera en que ese bebé es todo su mundo”, señaló.

Allison Ronco, enfermera y coordinadora de educación en cuidados intensivos de 32 años, fue la primera enfermera de la UCIN en dar a luz en 2019, pero dice que el reciente baby boom del hospital no es nada fuera de lo común.

“Siempre tenemos un baby boom así. Para nosotros, es simplemente nuestra normalidad”, dijo Ronco. “Las pacientes bromean con no beber el agua de el hospital a menos que quieran quedar embarazadas. Definitivamente todas somos muy buenas amigas. Todas estamos juntas, criando a estos bebés”.

La instalación es la única UCIN de nivel IV en la región y estas enfermeras atienden a “algunos de los bebés más complejos y gravemente enfermos del Medio Oeste de los Estados Unidos”, según un comunicado del hospital.

Carbaneau sabe lo que es ser madre de un bebé enfermo después de que su hijo naciera con una rara afección cardíaca.

“Era un desastre porque como enfermera he visto muchas cosas”, dijo. “Fue una experiencia extracorpórea porque sabía qué esperar cuando lo transportaban a la UCIN”.

Su hijo Ben se ha recuperado desde entonces, pero la terrible experiencia la traumatizó.

“Estaba nerviosa por volver al trabajo, ya que fue el evento más traumático de mi vida”, dijo Carboneau. “Había otro bebé con el mismo diagnóstico que Ben. Hablé con la mamá para darle tranquilidad de compartir la experiencia de Ben… el resultado positivo de Ben me hizo sentir más agradecida y bendecida y me ha reafirmado en lo que hago a diario”.

Ella dice que sus compañeras de enfermería le dieron el apoyo que necesitaba para volver a trabajar.

“Estas chicas me ayudaron a superar este momento de mi vida porque pudieron apoyarme incluso recordándome que debía comer y trayéndome café”, agregó Carbaneau.

Las fotos de las mujeres de pie una al lado de la otra sosteniendo a sus bebés se han vuelto virales, pero las enfermeras son tan cercanas en la vida real como parece en la cámara.

“Podemos conversar y desahogarnos y estar emocionadas la una por la otra”, dijo la enfermera Michelle Janes. “Especialmente aquellas de nosotras que ya tenemos hijos. Muchas nos damos opiniones sobre las cosas. Tenemos un grupo de Facebook y opinamos sobre todo, desde la pañalitis hasta los niños que salen de la cuna”.

Todos esos consejos adicionales sobre crianza han resultado útiles a medida que estas mujeres hacen malabarismos con la maternidad y el estrés de trabajar durante la pandemia.

Pero encontrar una guardería no es un problema. Todos los niños suelen jugar juntos mientras sus madres están ocupadas en el trabajo. Las enfermeras generalmente se rotan para cuidar a los niños para adaptarse a los horarios ocupados de todas.

“Es un gran apoyo y siempre hay una gran cantidad de niños pequeños corriendo”, agregó Janes. “Y todos se están reconociendo, y eso es divertido”.

Las mujeres dicen que tener un bebé ha cambiado su forma de ver el trabajo. Todas han experimentado los desafíos que conlleva ser una nueva madre.

“Una vez que tienes tu propio bebé, todo cambia repentinamente”, dijo Ronco. “En su mayor parte, hemos llegado a casa con bebés sanos. Y realmente podemos empatizar con esas mamás y la lucha que deben atravesar al no poder hacerlo”.

Casi todos los bebés han sido niños y tenemos solo un puñado de niñas.

Melanie Cole, una de las pocas enfermeras que tuvo una niña, contó: “Inmediatamente tú y tu bebé entran en esta tribu de mamás. Es simplemente un grupo divertido para poder crecer, aprender y sentir siempre que tienes a alguien de tu lado que te apoya a ti y a tu bebé”.

La mayoría de los niños nacieron sanos con algunas excepciones. Poder llevar a sus hijos a casa desde el hospital les mostró lo aterrador que puede ser tener un hijo en la UCIN.

“La mayoría de nosotras llevamos a nuestros bebés a casa como bebés saludables, y trabajar donde ayudas a bebés muy enfermos te da una perspectiva diferente y un nivel completamente nuevo de empatía”, agregó Ronco. “Lo hacemos porque amamos a los bebés”.