Como sin duda habrás notado durante los últimos años, encontrar un trabajo en enfermería actualmente no es tarea fácil. Pero lo que puede no resultar tan evidente es que igualmente no resulta fácil ser un reclutador de enfermeras en la economía actual.
Una desafortunada reclutadora le dijo a un postulante que simplemente no era una buena opción; el enfermero llamó más tarde para decirle a la reclutadora que no era atractiva. Esto no fue tan malo como que el enfermero estaba tan enfadado por haber sido rechazado que tuvieron que cerrar todo el edificio debido a sus amenazas… (continúa en la página 2)
Estas historias, por supuesto, son poco comunes y es mucho más probable que las encuentres en internet que en la oficina de un reclutador. Pero además de estas situaciones que hacen que el proceso de rechazo sea fácil para los profesionales de recursos humanos, ¿qué ocurrió cuando TÚ entraste, tuviste lo que sentiste fue una gran entrevista y aun así no conseguiste el trabajo? Los expertos en recursos humanos confiesan que funciona—y que no funciona—durante el proceso de contratación.
Errores Que Cometen Las Enfermeras
Cuando se trata de las entrevistas, puedes cometer algunos errores—cosas que tal vez no pensaras dos veces—que los entrevistadores pueden clasificar en:
- ¿Qué dijiste? Katie Cwalinski, PRC, CSSR, Gerente de Reclutamiento de enfermeras en la Clínica de Cleveland, afirma: “Los errores que cometerán algunas enfermeras incluyen hablar negativamente sobre su puesto o supervisor anterior o actual, o sólo hablar sobre el turno que necesitan, no sobre el motivo por el que desean trabajar en un área clínica determinada o por qué quieren trabajar para una empresa en particular”. Es importante que mantengas tus comentarios de manera profesional y positiva cuando hablas de tus empleadores anteriores.
- Documentación, por favor. Algunas enfermeras tienen experiencia, pero carecen de los documentos para respaldar sus credenciales. Amanda Oldfield, vicepresidenta de Recursos Humanos de Verizon Care Services con sede en North Palm Beach, Florida, en Estados Unidos, indica: “Cuando acudes sin mostrar esos documentos, no podemos contratarte. Tienes que mostrar las constancias de culminación de la universidad, y quienes han sido enfermeras durante 20 o 30 años no poseen esa documentación”. Muchas veces, si una enfermera no puede presentar estas credenciales, no puede ser contratada y tiene que volver a tomar horas de educación continua.
- No te preocupes por las cosas pequeñas. Si quieres que un profesional realice tu currículum, no te impacientes. La mayoría de los reclutadores de enfermeras aceptan un currículum simple que sencillamente especifique quién eres y qué cargos has tenido. La mayoría de los reclutadores de recursos humanos están más interesados en cómo interactúas en persona.
- Eres lo que vistes. Es posible que te hayan recomendado “arreglarte” para una entrevista de enfermería. De acuerdo a nuestras fuentes expertas, esto es un tanto mítico. Muchos reclutadores están de acuerdo con que las enfermeras asistan con uniforme, pero Oldfield advierte: “Algunas chicas llegan con uniformes deteriorados y con pequeñas cosas colgando de sus bolsillos, y eso no es apropiado”.
Motivos Por Los Que No Te Contratan
- Algo del pasado. La mayoría de los reclutadores no contratará a alguien con antecedentes penales. Emily Gutiérrez, una enfermera reclutadora en el sur de California, afirma: “No se nos permitió contratar candidatas que hubieran sido encarceladas”. Oldfield va un paso más allá: “Estamos señalando que quienes tengan delitos menores en su historial no son elegibles. No contratamos a nadie con antecedentes”. Si cometiste un crimen en el pasado, este podría ser un motivo por el que no se te ofrece el trabajo.
- Simplemente no queremos a alguien… eh… como tú. La personalidad es otro gran motivo para el que alguien de recursos humanos rechace a una aspirante potencial. Cwalinski declara: “Las tres principales razones por las que rechazo a una aspirante son la comunicación escasa, las respuestas inapropiadas y la falta de motivación”. Gutiérrez está de acuerdo. “La personalidad puede ser una desventaja. Si la persona no tiene una buena forma de tratar a los pacientes, no quiero contratarla. Las enfermeras son calificadas de acuerdo a su personalidad, la forma de atender a los pacientes y el servicio al cliente”. Cuida cómo te diriges a tu entrevistador y asegúrate de que lo haces de manera abierta y amistosa. Si un reclutador no cree que vas a tratar a un paciente con amabilidad, es probable que no obtengas el trabajo.
Otras razones mencionadas los reclutadores de enfermeras por las que no contratan a una postulante incluyen:
- Falta de experiencia
- Deshonestidad
- Historial de abuso de drogas
- Falta de higiene
- No aprobar una prueba de capacidades básicas
Lo Que Están Buscando
Entonces, ¿qué están buscando? Cwalinski toma en cuenta “si la postulante tiene o no adaptación cultural, si ha tenido un historial de trabajo estable, qué tan motivada está, cuáles son sus metas a largo plazo, y su nivel de interés y deseo de desarrollo profesional”. Oldfield toma en cuenta la experiencia y las habilidades básicas. “Si entras y te presentas bien y con todos tus documentos, demuestras que puedes hablar claramente y puedes mantener una conversación conmigo, entonces eres una buena candidata”.
Consejos Para Las Recién Graduadas
Parte de esto puede resultar un poco deprimente para las recién graduadas que no tienen la experiencia para rivalizar en este difícil mercado laboral. Gutiérrez ofrece este consejo: “Para las enfermeras recién graduadas, algo que recomiendo insistentemente es que cuando realices tu rotación clínica, hagas un gran trabajo porque te están observando. Expresa tu interés a los jefes de departamento y tus instructores, y si puedes preséntate ante Recursos Humanos, solo para ser más visible. Toma en serio tus historias clínicas porque podrías ser una de las pocas a las que tomarán en cuenta cuando comience la contratación. Se necesita una buena suma para entrenar a una recién graduada en un hospital. Asegúrate de destacar”.
