Según la teoría de la evolución, todos hemos evolucionado de especies más básicas.
Los animales desarrollaban extremidades si las necesitaban y desarrollaban pulmones para vivir en tierra. Algunos cambiaban de color para mezclarse con la fauna y otros desarrollaban importantes mecanismos de defensa, como las púas del puercoespín.
Como la evolución continua, quizá la enfermera perfecta evolucionará del simple ser humano que es hoy en día. Aquí tienes algunas de las cosas que esta nueva criatura tendrá:
1. Una vejiga de 190 litros
¿Has intentado hacer RCP cuando realmente, realmente, REALMENTE, tienes que orinar? No digo más.
2. Dedos capaces de detectar la temperatura y de convertir Fahrenheit a Celsius
Se acabó buscar termómetros y se acabó el preguntar una y otra vez “¿Cuál era su temperatura?” No más frustración porque el termómetro electrónico no está cargado, se acabó buscar el dichoso termómetro y, si trabajas en una zona donde todavía se utilizan termómetros de cristal, se acabó que salgan volando mientras los estás sacudiendo para que bajen.
3. Ruedas retractiles debajo de los pies
Estas ruedas permitirían que la enfermera se desplazara sin esfuerzo desde una punta de la sala a la otra. Tendrían velocidades ajustables: rápido, superrápido y código azul.
4. Sentido del olfato ajustable
Algunas veces, ser capaz de oler malos olores es demasiado para una enfermera. No queremos tener la capacidad de saber si un paciente tiene c.diff solo con olerlo. En serio.
5. Cuatro manos
Realmente nos gustaría tener más, pero ¿dónde las pondríamos? Este deseo es autoexplicativo.
6. Un disco duro por cerebro con una memoria expandible
Esto sería maravilloso. Sentados tranquilamente recordaríamos todo lo que nos han contado sobre el paciente sin tener que escribirlo (y tener después que descifrar lo que hemos escrito). Seríamos capaces de recitar de un tirón los resultados del laboratorio y las observaciones cuando el auxiliar apareciera de la nada queriendo saber qué pasa. Sí. Sería fantástico.
7. Un sistema interno de traducción
No solo seríamos capaces de traducir de una lengua a otra, también lograríamos entender los balbuceos y a los médicos. Eso sería todo un logro en sí mismo.
8. Brazos capaces de levantar al más pesado de los pacientes
Se acabó tener que buscar habitaciones con elevadores en el techo o elevadores Hoyer portátiles. La superenfermera sería capaz de coger a cualquier paciente y levantarlo de manera segura.
9. Poderes psíquicos
¿No sería maravilloso saber exactamente a qué hora va a llegar el médico para que la familia de la 345 deje de preguntártelo? ¿Y qué me dices de saber si un paciente va a entrar en parada justo cuando estás a punto de empezar a hacer un complicado vendaje a otro paciente? Los poderes psíquicos serían de gran utilidad para ayudarnos a organizar nuestros días un poco mejor.
10. Sentido del humor
Es difícil seguir adelante los días de mucho estrés. El sentido del humor y la habilidad de poner las cosas en perspectiva pueden hacer que esos días sean soportables. Pero si piensas en ello, no necesitamos el futuro para esto. Esto es algo que podemos hacer desde ya. ¿Te apuntas?