Como enfermera, ya sabes que no hay dos días de trabajo que sean iguales. Ya sea que trabajesen el área de emergencias, en el áreadecirugía, en el áreade maternidad o en cualquier otra área del hospital, nunca podrás planificar cómo será tu día. Una enfermera que trabaja en el Hospital Harrington en Southbridge, Massachusetts, Estados Unidos, descubrió que tan dramáticamente diferente puede ser un día de trabajo.
Un Encuentro Cercano a la Muerte
La enfermera Elise Wilson estaba trabajando como cualquier otro día en la sala de emergencias del Hospital Harrington. Sin embargo, mientras realizaba un chequeo de rutina en un paciente que se quejaba de dolor en la muñeca, el joven la atacó. Durante el ataque, Wilson fue golpeada 11 veces antes de que el paciente tomara un cuchillo. Cuando Wilson se recuperaba de los golpes, levantó la vista sólo para ver al paciente de pie por encima de ella durante una fracción de segundo antes de que él continuara agrediéndola. En lugar de seguir golpeándola, la apuñaló varias veces en el cuello, el brazo y otras partes del cuerpo.
Durante el ataque con cuchillo, fueron cortados dos de sus nervios, así como su arteria braquial. Sus heridas fueron graves y debido a ellas casi se desangró hasta morir. Afortunadamente, sus gritos llamaron la atención del oficial de seguridad, que llegó al lugar y apartó al paciente fuera de control. En ese momento, milagrosamente Wilson pudo ponerse de pie y se dirigió a la sala de traumatología antes de colapsar. Sorprendidos por la escena que tenían ante ellos, sus compañeros de trabajo comenzaron de inmediato los esfuerzos de reanimación y la prepararon para llevarla al centro de trauma.
Estando en el centro de trauma, Wilson fue sometida a ocho horas de cirugía de emergencia para salvar su vida. Después pasó las siguientes dos semanas en la unidad de cuidados intensivos. Durante parte de su tiempo allí, estuvo conectada a un respirador. Luego, Wilson pasó dos semanas más en la unidad de rehabilitación física.
Particularmente,explicó:
- El paciente no estaba gritando o insultando.
- El paciente no mostraba señales externas de ira.
- El paciente actuaba distraído.
Añadió que, durante el ataque, el paciente la apuñaló por primera vez en el cuello. Luego de eso, ella comenzó a gritar y golpetear en el suelo con sus pies para llamar la atención.
La Recuperación
Durante su recuperación, varios miembros de la familia la asistieron. Su hija, que también es enfermera de la sala de emergencias, incluso tomó un mes de permiso para ayudarla. Su hijo se ocupó de la mayor parte de las interacciones con los medios y la ayudó a responder las preguntas del fiscal de distrito y la policía. Wilson todavía se está recuperando del incidente y actualmente está de baja por impedimento.
¿Pero qué motivó el ataque? La teoría en el trabajo es que el paciente tenía un historial de problemas de salud mental. Se cree que él no usaba sus medicamentos y en su lugar estaba tomando drogas ilícitas. Según Wilson, su atacante estaba furioso con el hospital porque había ido al hospital dos semanas antes del ataque y no recibió los medicamentos para el dolor que pidió. Ella dijo que su ira se desbordó, y que ella simplemente estaba en el lugar equivocado en el momento equivocado.
Siguiendo hacia adelante
Wilson señaló que su vida ha cambiado dramáticamente. Aunque se está recuperando, las lesiones que sufrió tendrán un impacto prolongado en su calidad de vida. Por ejemplo, ya no puede subir su cremallera o abotonar nada por sí misma y ni siquiera puede sostener una papa lo suficientemente bien como para pelarla. Su sentido del tacto también se ha visto afectado, ya que no puede sentir las cosas cuando al tocarlas, incluyendo la mejilla de su nieta.
Sin embargo, Wilson no tiene intención de detenerse. Después de trabajar durante 47 años como enfermera, 36 de los cuales fueron en una sala de emergencias, Wilson está dedicando su tiempo y energía para crear conciencia sobre la seguridad de las enfermeras. Su propósito es lograr que los hospitales sean más seguros para las enfermeras de todo el mundo.
¿Qué piensas? ¿En tu área u hospital hansufrido alguna vez un incidente como el que experimentó Wilson?