9. Aprende a escaparte educadamente. Aunque a los pacientes les encanta hablar, algunas veces tienes que escaparte de una larga historia — que realmente no necesitas oír — para poder hacer tu trabajo. No quieres parecer grosera o desinteresada por lo que puedes necesitar algo de práctica para hacer esto bien. Intenta decir cosas como, “Lo siento mucho. Me tengo que ir para atender a otro paciente, pero no estoy lejos si me necesitas y, si tengo un momento libre, me escaparé para continuar con nuestra conversación.”
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